Fotografía: Nelly Téllez

 

El viejo telar de chicote no sólo ha logrado mantener unidos los hilos para crear manteles o rebozos, sino que ha entrelazado la vida de cuatro generaciones a lo largo de más de 70 años y ha impulsado la creatividad de los artesanos para competir con las prendas industrializadas sin olvidar las tradiciones.

Luis Juárez García, artesano del pueblo de San Luis Tecuahutitlán, municipio de Temascalapa en el estado de México, tiene 20 años como tejedor, tradición que si bien inició con su abuelo, hoy sus padres, sus cuatro hermanos, sus primos, cuñados, sobrinos e hijos, que integran alrededor de 10 familias, son quienes mantienen viva la tradición.

En ningún momento se han visto tentados en usar un telar industrial porque están interesados en atesorar el oficio tal cual fue ejecutado por sus antepasados y hacer de cada prenda, una pieza única en el mundo, así como conservar el telar que usó su abuelo y que es desarmado para recorrer diversos estados.

La calidad de sus piezas ha causado que personas de los Estados Unidos hayan mostrado interés por adquirirlas; pero para poder exportar, necesitan un nombre y un logotipo, por ello este año han comenzado las tareas del registro de la marca “La casa del telar” haciendo alusión a que en casa, siempre hay un telar.

Conscientes de que su principal competencia son las prendas en serie, desde hace dos años atrás tomaron la decisión de adaptarse a las exigencias de los clientes y comenzar a confeccionar nuevas artículos como vestidos, delantales, caminos de mesa, tortilleros, baberos, lapiceras, moños y zapatitos de bebé, principalmente.

Para crear estas piezas, Juárez García se sube a los pedales y con un ritmo casi dancístico mueve sus piernas para poner en marcha el bastidor, manejar la caja que compacta los hilos donde crea estampados coloridos, pues sabe que de este tejido no sólo saldrán prendas, sino también nuevos hilos para tejer un mejor futuro que beneficiará a todos los integrantes, quienes con creatividad y pasión preservarán la tradición.

 

SJA